Blockchain, cambiando las reglas de juego


El Blockchain se basa en un registro único de transacciones compartido por una red de nodos, a modo de red distribuida de información. Cada transacción tiene una dirección de origen, una de destino, lleva una firma digital y un dato (por ejemplo, en el caso más conocido, en el bitcoin, el dato es la cantidad).

Cada bloque es un conjunto de transacciones que se han consolidado. Y finalmente cada cadena de bloques son bloques enlazados que conforman las cadenas de la verdad. Finalmente, todas estas cadenas de bloques hacen una red, que es única.

El Blockchain es una de las tecnologías más disruptivas y con un enorme desarrollo para los próximos 10 años. Cambia por completo las reglas de juego. Se basa en tres componentes:
  1. Internet.
  2. Firma digital.
  3. Redes "peer to peer" (descentralizadas, distribuidas y autónomas).
La base tecnológica, que ya existe, es muy importante pero el verdadero cambio disruptivo se produce en los modelos de negocio.

En la actualidad, existe una tendencia hacia el modelo de economía colaborativa. Las plataformas son las piezas principales y los usuarios se comunican a través de ellas.

De esta manera, los modelos actuales tienen un propietario que pone las reglas (la plataforma). Blockchain las elimina. Elimina los intermediarios que no aporten valor, hacia una "peer to peer economy", una economía colaborativa de verdad.

Otro aspecto importante es la privacidad. Nos encontramos antes una gestión relativamente novedosa del dato. En Blockchain, al haber desintermediacion es el usuario el que gestiona su datos. Con este modelo el dato es propiedad del usuario pero de verdad, no solamente legalmente. El dato lo gestiona el usuario. Se produce también un mayor control sobre la desinformación.

La aplicación más conocida es Bitcoin pero surgen y surgirán muchas más. Pongamos por ejemplo UBER. Se podría organizar un modelo de negocio igual, eliminando al intermediario. El actual modelo de plataformas se basa en las recomendaciones y estas dependen del intermediario (por ejemplo, en Amazon).

Con Blockchain, la confianza la gestiona el usuario. Con el sistema de gestión de identidad no es tan fácil suplantarla. La trazabilidad y la transparencia son las características más importantes. Un ejemplo es la cadena de fabricación de leche u otro alimento. En la actualidad se confía en la marca pero no conocemos la trazabilidad desde el origen.

Blockchain afecta a todas las industrias que gestionen datos. Quizá la sanidad es la que más tardará por la importancia de los datos pero tiene un desarrollo enorme.

Otra aplicación importante es en Internet of Things (IoT). La nevera se comunica con el súper o la caldera con el servicio de mantenimiento sin necesidad de pasar por mí o por mi móvil.

La relación con la administración pública también cambiará por completo. Se podrá ver, por ejemplo, en qué se gasta un presupuesto público.

Otro campo con enorme desarrollo es el de los Smart Contracts o contratos inteligentes. Se trata de un código informático que permite que se ejecuten los términos de un contrato. Los acuerdos se pueden codificar de manera que se ejecuten unas acciones posteriores.